El legado Visigodo en la provincia de Almería:

Almería fue ocupada e invadida por vándalos y visigodos. Tras un breve periodo de ocupación bizantina (el SE español fue el único territorio peninsular en su poder durante varios años), Suintila integra definitivamente a Almería en el reino visigodo el año 621 y expulsa a las fuerzas de Bizancio. En esos años, mantuvieron su importancia las antiguas poblaciones de Abdera, Urci y Baria.

La leyenda de Amalarico:

Amalarico (511-531) fue rey de los visigodos, hijo de Alarico II, que murió joven y descendiente directo de uno de los bárbaros que saqueó Roma. Gobernó al principio, por ser un niño, bajo la regencia de su abuelo Teodorico, rey de los ostrogodos.

 

Amalarico se casó en un matrimonio de conveniencia con Clotilde, hija del rey de los Francos y consiguió la pacificación con este pueblo. A partir de entonces, fue arrebatando cada vez más territorios por la Península a los pueblos hispanorromanos. Estableció la sede de su reino en Sevilla y siguió haciendo incursiones por la Bética. Hay monedas visigodas datadas en esas fechas del siglo VI halladas en la actual Pechina.

Las crónicas lo definen como un rey violento, altivo, que abrazó la herejía cristiana del arrianismo.

Historia Antigua de Almería, basándose en los primeros textos clásicos, es agobiante. Hay, sin embargo, un episodio exótico, puntual como un hito, pero que se ha venido reiterando hasta la saciedad vinculado a la historiografía local y que ha contado con paladines y detractores. En tiempos del emperador Valentiniano, en 365, hay un documento del historiador Amiano Marcelino que da cuenta de un terremoto en el Mediterráneo que afectó notablemente a Almería, quedando secas sus playas. Nada –o casi nada- más se escribió sobre lo que hoy es Almería. Hasta que un canónigo y archivero de Gerona, Francisco Tarafa, en su obra ‘De Origine et rebús gestis Regum Hispaniae’, de 1553, introduce la nota de que la antigua Urci la reedifico el rey godo Amalarico en 528, poniéndole por nombre Amalaria, que se mantiene hasta hoy.

Crea tu propia página web con Webador